La creciente demanda de berries exige el desarrollo de nuevas y mejores variedades vegetales capaces de adaptarse a las condiciones de México, atender los requerimientos de los agricultores y la calidad y valores de los consumidores. Para ello, la diversidad genética y la investigación, bajo condiciones de certidumbre legal, son fundamentales, escribe Enriqueta Molina.
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Autor:

Enriqueta Molina