Santamarina Steta

Más empresas mexicanas consideran inversiones en EE. UU.

La incertidumbre política en casa y el atractivo de la economía más grande del mundo son dos factores que han llevado a las empresas mexicanas a considerar invertir en Estados Unidos con más seriedad que nunca. Pero muchas empresas no están seguras de cómo proceder o por dónde empezar.

Esas son algunas conclusiones de los viajes de negocios internacionales que realizamos durante el año pasado en conjunto con el Departamento de Comercio de Carolina del Sur y la Embajada de los Estados Unidos en México y nuestras conversaciones recientes en México con más de una docena de empresas, desde las que cotizan en bolsa hasta las familiares, en sectores como el farmacéutico, petroquímico, textil, artículos para el hogar y electrodomésticos.

¿Qué está causando que las empresas mexicanas consideren mirar hacia el norte?

La gran mayoría de los líderes empresariales con los que hablamos mencionaron las oportunidades de crecimiento y la incertidumbre geopolítica como razones para considerar inversiones en el extranjero, especialmente después de ciertas acciones unilaterales que el gobierno mexicano ha tomado recientemente, como:

  • La expropiación de 120 kilómetros de vías férreas propiedad del conglomerado Grupo México utilizando la figura de expropiación para un proyecto de utilidad pública.
  • La compra de 13 operaciones de generación de energía propiedad de una empresa española para permitir que la empresa eléctrica estatal CFE controle el 54% del mercado eléctrico.

Además, surgen preocupaciones adicionales porque el gobierno actual tiene el control de la Cámara y el Senado con la capacidad de aprobar leyes con muy pocas oportunidades para que la comunidad empresarial intervenga.

En general, la percepción es que los negocios en los EE. UU. son más estables y predecibles que en México. Muchas empresas con las que hablamos estaban particularmente interesadas en el sureste de los EE. UU. (lo cual es la tendencia más nueva, ya que las empresas mexicanas comúnmente eligieron estados como California, Texas y Florida en el pasado), pues dicha área ofrece acceso a más del 70 % de la población de EE. UU., dentro de un mismo día de distancia en automóvil, así como un fácil acceso a puertos y ciudades clave en la costa este. Las empresas también se sintieron atraídas por el costo de hacer negocios del sureste y la disponibilidad de mano de obra.

Consideraciones clave para las inversiones estadounidenses

A medida que las empresas exploran su primera inversión en EE. UU., las cuestiones legales a considerar incluyen:

Elegir la estructura corporativa más adecuada para las operaciones en EE. UU, pues una entidad legal en los EE. UU. se forma a nivel estatal y existen varios tipos de entidades estadounidenses (no tienen entidades federales o nacionales). Las corporaciones y las compañías de responsabilidad limitada (LLC) son dos opciones comunes, y cada una tiene sus propias ventajas y desventajas.

Selección de un sitio y obtención de incentivos gubernamentales. Existe variabilidad en las tasas impositivas estatales y locales, la disponibilidad y el costo de los bienes inmuebles, el acceso a mano de obra calificada y la probabilidad de tratar con sindicatos, así como la riqueza de los paquetes de incentivos gubernamentales.

Regulaciones de EE. UU. Las leyes de inmigración de EE. UU. son complejas y pueden causar problemas y demoras a las empresas que no planifican con anticipación sus viajes y necesidades de personal. Las empresas que se ubican en los EE. UU. también deben comprender sus obligaciones en virtud de las leyes fiscales y ambientales federales, estatales y locales aplicables, ya que las regulaciones allí tienden a ser tan complejas como en México.

Dada la miríada de consideraciones en juego, puede ser especialmente valioso asociarse con profesionales legales y de selección de sitios que puedan proporcionar respuestas basadas en datos a las preguntas clave de cada empresa.

¿Qué pasa con las empresas que deciden quedarse e invertir en México?

A pesar de la situación adversa en México, la inversión extranjera directa sigue ocurriendo. México ha sido un lugar natural para acceder al mercado de Estados Unidos, lo que puede verse potenciado por el efecto del nearshoring, debido a las disputas económicas de EE. UU. con China y también porque el gobierno mexicano quiere incentivar la inversión extranjera en el sur del país. Factores adicionales son el reciente fortalecimiento del peso mexicano frente al dólar estadounidense y las atractivas tasas de interés en México, en algunos casos superiores al 11%.

Artículo en colaboración con Parker & Poe. Para obtener más información, comuníquese con los autores o con su contacto habitual en Santamarina + Steta.

Autores

Andrés Rodríguez
Socio
arodriguez@s-s.mx

Ernesto de la Puente
Asociado
edelapuente@s-s.mx